He perdido las uñas y tengo secos los ojos.
En el largo camino de la tortura
cada hueso quebrado ya es ceniza.
Tengo el linaje y las venas vacías
de los que recortan alaridos de la oscuridad.
Fui quebrado, rajado, derrotado,
olvidado, transvasado, hundido,
latigueado, cortado, triturado;
y al fondo del abismo, consumido.
No tengo piel, ni corazón ni huesos
y el espíritu me brota entre los dedos.
Pero camino.
No busco el horizonte ni lo eterno.
Quiero una eternidad donde me duerma.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Es un día de frío. Lo sé porque es el viento y el cariño del gato las cosas que lo anuncian. Renovado y discreto este primer día del oto...
-
Yo soy en el amor como las nubes, pues pertenezco al amplio horizonte, y desde allí observo tus caminos. Puedo permanecer en mis alturas...
-
Llena, pues, de palabras mi locura o déjame vivir en mi serena noche de alma para siempre oscura. Federico García Lorca ¿Por que...
-
Resido en el espacio altivo y distraído que priva a la tristeza. Abitamos un limbo de amaneceres bellos, pero vanos y tristes, como flor...
No hay comentarios:
Publicar un comentario