sábado, 23 de noviembre de 2013

No se como decirlo.
Es como esos secretos que se guardan
porque no tenemos las palabras
para poder decirlos.

No se como empezar. Es demasiado.
A veces el silencio y la mirada son el mejor lenguaje
para contarle a Dios de lo que amamos.

Es que tan bellos son sus ojos,
que me tiemblan las manos,
y le digo que sí.

No se como decirlo.
Se parece al milagro que los demás esperan
en el viento, en la lluvia, en el aire que duerme.
Yo encuentro el milagro en esos ojos claros
y cada día espero que me encuentres.

Es un día de frío.  Lo sé porque es el viento  y el cariño del gato  las cosas que lo anuncian. Renovado y discreto este primer día  del oto...