martes, 8 de octubre de 2013

Hay veces que merecen un milagro.
Hay veces, ocasiones, terribles situaciones
que, opino, deberían terminar en abrazo.
Hay veces que se sueña y no se alcanza;
pero, en bien de una justicia loca,
deberíamos estrecharnos las manos
y mirarnos tan cerca como podamos.

Sería justo, sincero,
hasta tierno diría,
que dios al fin despierte
y nos conceda..

Hoy no se que escribir, porque las cosas  están frías y muertas,  el silencio ha tomado los días de la semana.  Miro por la ventana  como el...