Y entre las nubes llegaron ellos,
como garras de plata derretida.
Dragones, dragones alados.
Solo, de luz, dragones en el cielo.
Mirad, allí, en lo alto llegan.
Sus vientres enjoyados resplandecen
como serpientes o enredaderas
suspendidas entre las cumbres de las torres.
Sus lagrimas recorren los antiguos
caminos de la lluvia.
martes, 19 de abril de 2016
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