Como la mojarrita, que en el charco recrea
lo total y lo nimio que tiene el universo;
lo total y lo nimio que tiene el universo;
como el caracol sediento, con su cántaro seco;
como el gorrión pardo que se eriza de plumas
y pelea rudamente contra el más crudo invierno.
Así nomás la vida de este planeta herido
puede estirar las manos en mitad del océano
y aferrarse a la orilla de cada día nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario