Mis manos se desmigan.
Quizá ya se aburrieron
y quisieron hacer alas de mariposas
nocturnas y afelpadas.
Pero se transformaron en pellejos
y duelen en los dedos.
Se raspan y se quejan.
Se gastan y se encuentran.
Debajo de mi piel me crece piel,
de nuevo.
Mis pobres manos tontas,
la química las quema
y me borra las lineas.
Mis pobres manos rotas.
Mañana serán nuevas de nuevo.
sábado, 21 de junio de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Es un día de frío. Lo sé porque es el viento y el cariño del gato las cosas que lo anuncian. Renovado y discreto este primer día del oto...
-
“La vida, como un un péndulo, oscila constantemente entre el dolor y el hastío.” Arthur Schopenhauer "Sísifo de la luz, lo vi asce...
-
Es hermosa la lluvia. Si tenemos el techo que le de disciplina. Y es hermoso el sonido del metal y del agua, y la noche que brilla despu...
-
Yo he tenido el amor entre los brazos, pero no era el amor; y he roído sus mieles una a una, pero las encontré vacías. Y una noche, que ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario