jueves, 18 de enero de 2018

No me des tu dulzura, quedate aparte.
De pronto me molesta esta presencia
que ha venido a estrellarse en mi impaciencia.
No me hables así, ni siquiera me toques;
me traes, con tu cariño, horas perdidas.
Este cariño tuyo no me pertenece,
y ha venido a crecer en mala hora.

No debí abrir la puerta sin pensar
que este día llegaría. Crece alrededor mío
con sus salones y sus escaleras.


No hay comentarios:

Es un día de frío.  Lo sé porque es el viento  y el cariño del gato  las cosas que lo anuncian. Renovado y discreto este primer día  del oto...